No recuerdo como llegue frente a la puerta del despacho del director, pero allí estaba. Este llama para que entre.
-¡¿Tú?!- Dijo con mirada atónita.
-¡¿Yo?!- Respondí con sarcasmo.
-Te tenía como un alumno ejemplar Meneses.
Con las manos en los bolsillos me senté frente a él sin esperar invitación alguna.
-Qué le puedo decir, todos tenemos un momento de locura. El mío aun no termina.- Dije esto último casi en un susurro al tiempo que tomaba un pisa papeles de su escritorio y le miraba directo a los ojos.
-¿Por qué lo hiciste?- dijo desviando su mirada para posarla en el pisa papeles.
-Estaba aburrido, Director.- Respondí como si esto fuera lo más normal del mundo. Como me encanta sacar de quicio a las personas.
-Entiendes que ahora tenga que llamar a tus padres, ¿cierto?- Su tono estaba apunto de salirse de control.
-No, no tiene.- En ese momento me levanté y le di directo en la frente con el pisa papeles.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario